La llegada del año nuevo siempre va acompañada de una lista de nuevos propósitos, en la que cambiar la dieta y el estilo de vida son algunos de los más comunes. Pero, a veces, tendemos a ponernos objetivos poco realistas… Si tu propósito este año es disfrutar de la felicidad digestiva y de un bienestar integral, ¡esto te interesa!
Te presentamos una serie de hábitos saludables del aparato digestivo, ¡para que empieces el año de la mejor forma posible!
Recomendaciones para cuidar el sistema digestivo
¿Sabías que el sistema digestivo es el responsable del 80% de tus defensas, está conectado a tu cerebro a través de millones de neuronas, y produce el 90% de tu serotonina, conocida también como “la hormona de la felicidad”?
En este sentido, cuando te das cuenta de todo lo que pasa en tu sistema digestivo, ¡empiezas a cuidarlo de verdad! Porque la salud digestiva tiene un gran impacto en nuestra salud general y en nuestro bienestar emocional.
El estreñimiento, las digestiones pesadas, las diarreas y los gases alteran nuestro ritmo de vida, pero también pueden afectar a:
- Las defensas
- La calidad del sueño
- El nivel de energía
- La toma de decisiones
- Nuestro estado anímico
Así que, cuidar nuestra salud digestiva es cuidar nuestro bienestar integral. Además, debemos tener en cuenta que ésta se ve directamente afectada por los alimentos que ingerimos y el estilo de vida que llevamos.
Por lo tanto, aplicando hábitos saludables para el aparato digestivo, nuestro sistema digestivo puede funcionar de forma más eficiente, mejorando nuestra salud general y nuestra sensación de bienestar.
Hábitos para tener una buena digestión
A continuación, te presentamos algunos hábitos saludables del aparato digestivo que te ayudarán a tener mejores digestiones.
– Sigue una dieta rica en fibra
La fibra regula el tránsito intestinal y es clave para una buena salud digestiva. El primero de los hábitos saludables del aparato digestivo que proponemos desde Vilardell Digest es seguir una dieta rica en fibra, con abundante presencia de frutas y verduras, cereales integrales y legumbres 3-4 veces a la semana.
Los alimentos ricos en fibra se digieren más lentamente, retrasando la absorción de la glucosa en sangre después de las comidas. Esto favorece el control de la diabetes, la absorción del colesterol, la estimulación del tránsito intestinal y la prevención del estreñimiento.
Por otra parte, una ingesta regular de alimentos ricos en fibra también puede ayudar a prevenir o tratar diversas afecciones digestivas, como la diverticulosis, las hemorroides y el síndrome del intestino irritable (SII). Además, puede ayudarte a conseguir o mantener un peso saludable.
– Consume tanto fibra soluble como insoluble
El segundo de nuestros hábitos saludables del aparato digestivo es que una dieta saludable requiere una cantidad equilibrada de fibra soluble e insoluble. Es importante consumir ambos tipos de fibra, ya que ayudan al sistema digestivo de formas distintas.
Sus principales diferencias radican en que la fibra insoluble no puede ser digerida por el organismo y, por lo tanto, ayuda a aumentar el volumen de las heces, mientras que la fibra soluble absorbe agua y puede ayudar a evitar las heces demasiado acuosas.
Éstas son algunas buenas fuentes de fibra soluble e insoluble:
- Fibra insoluble: el salvado de trigo, las verduras y los cereales integrales, que ayudan a tener una digestión saludable.
- Fibra soluble: el salvado de avena, los frutos secos, las semillas y las legumbres.
– Incluye probióticos en tu dieta
El tercero de los hábitos saludables del aparato digestivo sería el consumo de probióticos, para ayudarte a equilibrar tu microbiota intestinal.
Al fin y al cabo, los probióticos son las bacterias saludables presentes de forma natural en el tracto digestivo. Consumiéndolos a través de los alimentos o suplementos, complementan una dieta adecuada y ayudan a reducir los efectos negativos del consumo de antibióticos y el estrés, entre otros.
Además, los probióticos pueden mejorar la absorción de nutrientes, ayudar a descomponer la lactosa, reforzar el sistema inmunitario e, incluso, tratar el síndrome del intestino irritable.
Vilardell Digest Probilac ayuda a equilibrar la microbiota intestinal para un mantenimiento diario de la salud digestiva. Sus cepas de probióticos Bifidobacterium animalis spp. Lactis (BIFOLAC12) y Bifidobacterium longum BB536, con estudios clínicos avalados, han demostrado incrementar el número de evacuaciones intestinales diarias y reducir el estreñimiento desde la primera semana.
– Mantén tus horarios de comidas
En cuarto lugar, otro de los hábitos saludables del aparato digestivo que te recomendamos es comer siempre a la misma hora, ya que puede ayudar a mantener el ritmo de tu sistema digestivo. Intenta sentarte a desayunar, comer, cenar y merendar siempre a la misma hora, para tener un sistema digestivo sano.
Además, te animamos a que practiques la alimentación consciente. Es decir, comer despacio y prestar atención a todos los aspectos de la comida (textura, temperatura, sabor), para ayudarte a prevenir problemas digestivos como indigestión, hinchazón y gases.
¿Cómo puedes comer de una forma consciente?
- Come despacio, porque la digestión empieza por la boca. Al masticar bien los alimentos, se garantiza que haya mucha saliva para la digestión.
- Concéntrate en la comida, apagando el televisor y guardando el teléfono.
- Fíjate en el aspecto y olor de los alimentos que componen el plato.
- Selecciona cada bocado de una forma consciente.
- Presta atención a la textura, la temperatura y el sabor de la comida.
– La hidratación es fundamental
Por último, no te olvides de mantenerte hidratado, ya que una correcta hidratación favorece la salud digestiva y general. La fibra arrastra agua hacia el colon para crear heces más blandas y voluminosas, lo que facilita el tránsito intestinal.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un consumo diario de al menos 2 litros de agua, incluyendo el agua contenida en alimentos y bebidas. No obstante, esta cantidad recomendada puede variar según factores como la edad, el clima o el nivel de actividad física.
Recuerda que tu cuerpo necesita mantenerse hidratado en todo momento para un correcto funcionamiento del aparato digestivo.
No obstante, si eres de los que siempre se olvida de beber agua, un buen truco es activar recordatorios en el móvil desde estas apps gratuitas.
– No dejes de lado el ejercicio
El sexto de nuestros hábitos saludables del aparato digestivo es realizar ejercicio de forma regular y llevar una vida activa.
El ejercicio regular ayuda a mantener los alimentos en movimiento a través del aparato digestivo, reduciendo así el estreñimiento. El deporte ayuda también a aliviar la tensión y estimula la liberación de endorfinas, unos neurotransmisores que actúan como analgésicos naturales y mejoran el sueño.
Además, el ejercicio también puede ayudarte a mantener un peso saludable, lo cual es bueno para tu salud digestiva.
– Controla el estrés
El último de nuestros hábitos saludables del aparato digestivo destacados es controlar, en la medida de lo posible, los estados emocionales que te alteren.
Demasiado estrés o ansiedad pueden producir cambios en tu microbiota intestinal y provocar síntomas como el estreñimiento por causas emocionales. De hecho, el sistema nervioso del intestino es tan influyente en un buen número de procesos del organismo que se le considera como nuestro “segundo cerebro”.
Ana Quiñoá, farmacéutica y nutricionista, nos cuenta qué problemas digestivos puede originar la ansiedad.
En definitiva, cuidar de nuestra salud emocional es también cuidar de nuestra salud intestinal. Así que busca actividades que te gusten para reducir el estrés y practícalas con regularidad.
Por último, pero no menos importante, ahora que ya sabes los mejores hábitos saludables del aparato digestivo, para empezar el año de la mejor forma posible, ¡demuéstranoslo! Te retamos a hacer nuestro test:
¡Te deseamos un feliz año nuevo repleto de felicidad digestiva!
Bibliografía
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