Los hábitos intestinales de cada persona son diferentes: hay quienes van al baño unas tres veces al día, mientras que otros lo hacen tres veces a la semana. Sin embargo, podrías estar estreñido si experimentas los siguientes síntomas:
- Menos de tres deposiciones a la semana.
- Heces duras o secas.
- Esfuerzo o dolor durante la defecación.
- Sensación de plenitud, incluso después de defecar.
El estreñimiento es uno de los problemas digestivos más frecuentes en nuestro país. De hecho, durante el verano, el estreñimiento ocasional puede aparecer con mayor frecuencia por diversos motivos. En este post te explicamos el por qué y cómo combatirlo.
Estreñimiento ocasional: causas
La principal función del colon es absorber el agua de los residuos de los alimentos en su paso por el sistema digestivo. A continuación, genera las heces (residuos). Finalmente, los músculos del colon eliminan estos residuos a través del recto. Si las heces permanecen demasiado tiempo en el colon, pueden volverse duras y difíciles de expulsar. Una dieta inadecuada suele ser la causa del estreñimiento. La fibra dietética y una suficiente ingesta de líquidos son necesarias para ayudar a mantener las heces blandas. El estrés, los cambios de rutina y las condiciones que ralentizan las contracciones musculares del colon o retrasan las ganas de ir al baño también pueden provocar estreñimiento. Entre las causas más comunes, se encuentran:
- Dieta baja en fibra.
- Poca ingesta de líquidos.
- Sedentarismo
- Retrasar el impulso de defecar.
- Viajes u otros cambios de rutina.
- Medicamentos, como ciertos antiácidos, analgésicos o diuréticos.
- Determinadas enfermedades, como las neurológicas, endocrinas o anorrectales.
El estreñimiento también puede asociarse al embarazo. Además, es más frecuente en mujeres y se acentúa con la edad. Cualquiera puede tener un episodio de estreñimiento ocasional, que puede durar desde unos pocos días hasta repetirse cada pocas semanas. A continuación, te damos unos consejos para prevenirlo.
Cómo combatir el estreñimiento ocasional en verano
Nuestro cuerpo está acostumbrado a unas rutinas y unos hábitos alimentarios concretos, que, a veces, en vacaciones alteramos. Durante el verano, los cambios de dieta, los viajes, el estrés y la falta de ejercicio pueden provocar la aparición del estreñimiento ocasional. También influyen la falta de hidratación y el hecho de retrasar la defecación cuando pasamos muchas horas fuera de casa. Cambiar la dieta por una más saludable y rica en fibras, y aumentar la actividad física son las formas más eficaces de tratar y prevenir el estreñimiento. También te ayudará adoptar las siguientes medidas: Bebe suficiente líquido, como agua o tés fríos, incluso aunque no tengas sed.
Añade a tu dieta alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras de hoja verde, cereales integrales y frutos secos.
Intenta comer siempre a la misma hora.
Procura no aumentar el consumo de alimentos procesados.
Limita el consumo de alcohol y de bebidas con cafeína.
No olvides hacer ejercicio. Busca las horas de menos calor para ello.
Si sientes la necesidad de defecar, no lo retrases.
¿Cómo puede ayudarte la fibra en la prevención o el tratamiento del estreñimiento?
La fibra regula la velocidad del tránsito intestinal, es decir, el tiempo que transcurre entre la toma de un alimento y la eliminación de sus residuos por las heces. Debido a su capacidad de retener agua, produce un aumento del bolo fecal, de modo que incrementa los movimientos del intestino y reduce el tiempo de tránsito intestinal. La fibra se presenta en formas solubles e insolubles:
Fibra soluble | Fibra insoluble |
Aumenta la viscosidad del bolo fecal facilitando el tránsito intestinal. | Aumenta el volumen del bolo fecal y acelera el tránsito intestinal. |
Ciertas hemicelulosas, bataglucanos, pectinas, gomas, mucílagos, fructooligosacáridos, almidón resistente. | Celulosa, lignina y algunas hemicelulosas. |
Se encuentra en la avena, cebada, frutas, verduras y legumbres. | Se encuentra en el salvado de trigo, salvado de avena y cereales integrales. |
Fuente: Anna Paré Vidal. (2022). XVIII Curso online de atención farmacéutica. Tema 6: Sistema circulatorio. El farmacéutico, nº 610, pp.47-52.
Se recomienda una ingesta de fibra de 25-30 g/día. La fibra dietética se encuentra en legumbres, cereales integrales, verduras, frutas y frutos secos.
El aumento del consumo de fibra debe ser gradual y acompañarse de suficiente cantidad de agua para evitar flatulencias y malestar intestinal. El beneficio se observa al cabo de varias semanas y consiste en una mejoría del volumen, una mayor frecuencia de evacuación y un reblandecimiento de las heces. |
El complemento alimenticio Vilardell Digest Transit es un regulador del tránsito con la exclusiva fibra Fibersol® que puede proporcionarte hasta el 19% de fibra diaria recomendada. Cuenta con estudios clínicos que demuestran que ayuda a ir al baño con mayor frecuencia y aumenta el volumen fecal. Además, produce menos gases que otras fibras y tiene un sabor agradable. Si ya estás tratando el estreñimiento con fibras, pero tu cuerpo no responde al tratamiento, existen otras soluciones que pueden ayudarte a ir al baño. Vilardell Digest Bilax es una alternativa natural para el estreñimiento ocasional con una capa laxante que favorece un buen tránsito intestinal y otra de fibra con efecto prebiótico que te ayuda a cuidarte por dentro. Este complemento alimenticio actúa de la noche a la mañana. Descubre más información sobre cómo evitar el estreñimiento mejorando tus hábitos alimenticios en esta entrada de blog.
Bibliografía
Anna Paré Vidal. (2022). XVIII Curso online de atención farmacéutica. Tema 6: Sistema circulatorio. El farmacéutico, nº 610, pp. 47-52.
NIDDK. (2022, 25 mayo). Constipation. National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases. Recuperado de: https://www.niddk.nih.gov/health-information/digestive-diseases/constipation
D. Cash, B. (2018, 5 mayo). Understanding and Managing IBS and CIC in the Primary Care Setting. National Library of Medicine. Recuperado de: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6158925/
Oliveira Magro, D., & Bernasconi, I. (2014, 24 julio). Effect of yogurt containing polydextrose, Lactobacillus acidophilus NCFM and Bifidobacterium lactis HN019: a randomized, double-blind, controlled study in chronic constipation. National Library of Medicine. Recuperado de: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4113128/