En verano vigila lo que comes, cuida tu sistema digestivo
El verano es una de las peores épocas para nuestro sistema digestivo, ya que es cuando más se sufren desórdenes en el tracto gastrointestinal. En algunas ocasiones, por ejemplo, dependiendo del destino de nuestras vacaciones, podemos sufrir diarrea.
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El verano es una de las peores épocas para nuestro sistema digestivo, ya que es cuando más se sufren desórdenes en el tracto gastrointestinal.

Los cambios de rutina, las variaciones en la dieta habitual, el sedentarismo y la baja hidratación afectan directamente a nuestro tránsito intestinal, provocando estreñimiento ocasional.

En algunas ocasiones, sin embargo, dependiendo del destino de nuestras vacaciones, el efecto puede ser contrario, podemos sufrir diarrea.

La diarrea es la deposición de heces blandas o líquidas, y en verano puede venir dada por distintas causas.

  • La más habitual es la infecciosa o vírica, y esta nos puede ocurrir en cualquier momento del año.
  • El calor hace que los alimentos se descompongan más rápidamente y, si no se mantiene la comida correctamente en el frigorífico, podemos ingerir productos en mal estado y con carga bacteriana que nos causarán diarrea.
  • Si viajamos a determinados países, corremos el riesgo de ingerir agua contaminada, que también nos pueden provocar malestar digestivo.

Durante las vacaciones hay que ser cuidadosos con el origen de los alimentos que ingerimos, asegurarnos que están en buen estado y ante cualquier duda es mejor ser precavidos y no tomarlos. Lo mismo pasa con el agua y las bebidas, si sospechamos que su procedencia o conservación no cumplen con unas buenas condiciones higiénicas, es mejor consumir bebidas debidamente embotelladas del hotel u otros comercios.

Pon mucha atención a la higiene en los alimentos y bebidas que tomas, de esta forma evitarás malgastar tus días libres en el baño.

¡Felices vacaciones!

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